Ya el universo, me puso en mi lugar, antes de ir, obligándome a ver, algunos defectos de carácter, que suelen salir a la luz, más que nunca, en esos últimos momentos; Indecisión, Pereza, Negación, Vanidad, Procrastinación y que más.
Pero he de decir, que la vida, puso todo a mi alcance, para poder acudir, y que me llevo tanto, que no podría escribirlo en una sola hoja.
Ya no solo el hecho de compartir, con 74 almas gemelas y todas las charlas dentro y fuera de las reuniones, que no es poco, también lo que trae de bueno para después.
De hecho, al volver, he hecho cosas que nunca había hecho, como reclamar a mi Madrina, que la he usado muy poco, darme cuenta que o trabajas diariamente o en mala dirección te encaminas.
Esta convención ha sido un gran espejo reflector de mi sombra. Cosa que admito y agradezco con total honestidad, y que me dan ánimos para volver al trabajo interior, y usar todas las herramientas a mi alcance.
Hasta ahora, fue la convención que menos lagrimas he derramado, no se si eso es bueno, o malo; síntoma de que estoy muerto por dentro o de que el programa me ha equilibrado más de lo que creía. Eso, solo en el futuro lo descubriré.
Muchísimas gracias a todas las personas por tomarse las molestias de organizarla o simplemente acudir, porque me ayudasteis muchísimo. Y a las personas que no pudieron ir, pues que habrá una próxima y Ojala pudiéramos vernos entonces.
¡Os Amo Almas Gemelas!